Durante la jornada de ponencias magistrales, destacadas figuras del ámbito judicial y académico coincidieron en la necesidad de colocar a la infancia en el centro de las decisiones judiciales. El Ing. Alfonso Malpica Olvera, presidente de Procúrame, A.C., encabezó una intervención ética y crítica sobre el papel del sistema en la protección de niñas y niños
La justicia con rostro humano fue el eje central de la jornada de Ponencias Magistrales en la que participaron figuras clave del ámbito judicial, académico y de la sociedad civil. En un evento que reunió a expertos, funcionarios, académicos y organizaciones sociales, se debatió sobre la urgente necesidad de repensar el sistema de justicia mexicano desde la mirada de la infancia.
El Ing. Alfonso Malpica Olvera, presidente del Grupo CUDEC y de la Fundación Procúrame, A.C., presentó la ponencia «La infancia como el centro de la justicia: El desafío ético e institucional de un sistema que debe aprender a escuchar», donde expuso con contundencia las fallas estructurales del sistema judicial ante los niños y niñas en situación de vulnerabilidad.
«La infancia no pide indulgencia, exige escucha. No necesita un sistema perfecto, necesita un sistema humano», afirmó Malpica, quien subrayó cómo el sistema judicial mexicano continúa revictimizando, desoyendo y desprotegiendo a los menores, aún bajo un marco legal aparentemente progresista.
Participación del presídium: Justicia con perspectiva de infancia
La jornada fue inaugurada por un presídium de altura, integrado por la Dra. Yolanda Romero Vázquez, Jueza de Control; la Dra. María Alejandra Almazán Barrera, Magistrada del Órgano de Administración Judicial; y el propio Ing. Alfonso Malpica Olvera, en su doble calidad de ponente y presidente de Grupo CUDEC.
La Dra. Romero Vázquez abordó en su ponencia «Medidas de Protección en el Procedimiento de Violencia Familiar» los retos que enfrentan los jueces al momento de dictar resoluciones en contextos de violencia intrafamiliar. Subrayó la necesidad de emitir medidas de protección eficaces y con enfoque psicosocial para resguardar el interés superior del menor.
Por su parte, la Dra. Almazán Barrera reflexionó sobre el rol del Poder Judicial en la creación de políticas públicas con enfoque restaurativo y empático, donde «los expedientes no deben opacar las historias de vida» de niñas, niños y adolescentes.
Una justicia que también educa
El Ing. Malpica Olvera enfatizó que el sistema judicial, incluso con buenas leyes, puede operar desde la indiferencia. A través de los casos de Ana y Emiliano, ejemplificó cómo la falta de escucha y protección efectiva puede dejar marcas emocionales profundas en la infancia.
Propuso adoptar modelos internacionales como el Barnahus noruego o las salas amigables de países escandinavos, donde se prioriza el bienestar emocional del menor durante el proceso judicial.
Sociedad civil: El tejido que impulsa el cambio
La jornada también evidenció el papel esencial de la sociedad civil en la transformación del sistema de justicia. En este marco, se reconoció el trabajo de organizaciones como Adelitas Edo. Méx., A.C., un colectivo de mujeres del Estado de México que impulsa proyectos de empoderamiento femenino, trabajo comunitario y transformación social en los 125 municipios de la entidad.
Con una agenda centrada en el bienestar y el desarrollo local, Adelitas articula un movimiento femenino, comunitario y político que contribuye directamente a generar entornos protectores para la infancia y promueve la participación activa de las mujeres en la defensa de los derechos humanos.
Conclusiones compartidas: Una agenda para el futuro
Las tres ponencias coincidieron en un punto clave: no basta con promulgar leyes, hay que transformar las prácticas. Esto implica capacitación continua, inversión en infraestructura emocionalmente segura y creación de equipos interdisciplinarios permanentes.
«Cada niño que entra a un juzgado es una oportunidad para reparar o para herir. Nuestro deber ético es que siempre repare», concluyó Malpica.
Ponentes
- Dra. Yolanda Romero Vázquez: Jueza de Control con experiencia en justicia penal y protección de derechos humanos en contextos de violencia familiar.
- Dra. María Alejandra Almazán Barrera: Magistrada del Órgano de Administración Judicial, promotora de reformas hacia una justicia más accesible y humana.
- Ing. Alfonso Malpica Olvera: Presidente de Grupo CUDEC y Fundación Procúrame, A.C., defensor de la justicia restaurativa y los derechos de la infancia.